LA UNIVERSIDAD DE STANFORD RECIBE $31.8 MILLONES PARA ESTABLECER UN CENTRO DE ENFERMEDADES VASCULARES PULMONAR

STANFORD – El Centro Médico de la Universidad de Stanford, a través de la Fundación Lucile Packard para la Salud Infantil, ha recibido $31.8 millones de un donante anónimo para establecer un centro para tratar a pacientes con enfermedad vascular pulmonar y apoyar la investigación dedicada a encontrar curas.

El Centro Vera Moulton Wall para Enfermedades Vasculares Pulmonares de Stanford brindará servicios integrales de diagnóstico y tratamiento para adultos y niños con todas las formas de enfermedad vascular pulmonar, con especial atención a la hipertensión pulmonar. El Centro Wall también apoyará y ampliará la colaboración en investigación entre las Facultades de Medicina e Ingeniería.

La enfermedad vascular pulmonar, que afecta los vasos sanguíneos de los pulmones, tiene un origen que varía desde cardiopatías congénitas hasta enfermedades autoinmunes y de la coagulación. Estas enfermedades, que afectan a pacientes de todas las edades, dificultan que el corazón bombee sangre a través de los pulmones para oxigenarla y, en sus formas más graves, pueden ser potencialmente mortales.

“El tratamiento de la hipertensión pulmonar, un trastorno en el que la presión arterial en las arterias pulmonares se eleva considerablemente por encima de los niveles normales, ofrece nuevas perspectivas gracias a los recientes avances, pero existe una necesidad imperiosa de un diagnóstico precoz y un mejor tratamiento”, afirmó el Dr. Jeffrey A. Feinstein, MD, MPH. El Dr. Feinstein, director del Centro Wall, es profesor adjunto de Cardiología Pediátrica en el Centro Médico de la Universidad de Stanford y director de Cateterismo Cardíaco Pediátrico y Congénito en el Hospital Infantil Lucile Packard. “El Centro Wall ofrece a Stanford, ya reconocida internacionalmente por su excelencia en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con enfermedades cardiopulmonares, la oportunidad de consolidar esa base”, concluyó.

Ramona L. Doyle, MD, codirectora del Wall Center, profesora adjunta de Medicina Pulmonar y de Cuidados Críticos y directora asociada del Programa de Trasplante de Pulmón/Corazón-Pulmón de Stanford, afirmó: “El Wall Center trabajará en estrecha colaboración con el Programa de Trasplante de Pulmón/Corazón-Pulmón de Stanford para estudiar nuevas terapias que puedan funcionar como un puente hacia el trasplante para pacientes que esperan un trasplante o como una alternativa para pacientes que no son candidatos a un trasplante”.

Feinstein agregó: “Esperamos que durante los próximos cinco años el Wall Center atienda a un número cada vez mayor de niños y adultos de todos los Estados Unidos y del extranjero, brinde oportunidades de capacitación avanzada para médicos en medicina pulmonar, cardíaca o de cuidados intensivos, y sea reconocido internacionalmente por la investigación de las causas primarias y secundarias de la enfermedad vascular pulmonar y su tratamiento”.

El Dr. Eugene A. Bauer, vicepresidente de asuntos médicos y decano de la Facultad de Medicina de Stanford, elogió el espíritu colaborativo e interdisciplinario del Centro y declaró: «Estamos profundamente agradecidos por la perspicacia y la generosidad del donante al financiar el Centro Wall para Enfermedades Vasculares Pulmonares. Confío en que servirá de modelo para la investigación y el tratamiento de numerosas enfermedades pediátricas y adultas».

La donación anónima, que lleva el nombre de Vera Moulton Wall, se realizó a través de la Fundación Lucile Packard para la Salud Infantil. Esta fundación, fundada en 1996, recauda fondos tanto para el Hospital Infantil Lucile Packard como para los programas pediátricos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford.

Vera Moulton Wall, quien falleció el Día de la Madre de 1988, nació en Savannah, Georgia, en 1927. Hija única, vivió en Savannah hasta la universidad, donde asistió al Mary Baldwin College en Virginia. Se graduó en biología y se dedicó a la docencia y a la biología.

Se casó en 1948 y fue madre de tres hijos. Pasó la mayor parte de su vida adulta en Dallas, Texas. Al momento de su fallecimiento, llevaba 40 años casada y tenía seis nietos.

Amigos y familiares recuerdan a Vera Moulton Wall por su generosidad. Dedicó su tiempo, sabiduría y corazón. Amaba profundamente a los niños y los entretenía sin parar, leyéndoles libros y contándoles historias de su propia creación. Rara vez daba consejos, pero a menudo otros la buscaban por su sabiduría. Inculcó en sus hijos el amor por el aprendizaje, un estándar de excelencia y la certeza de su amor y aceptación incondicionales.